CSIF ONCE lleva más de 20 años demandando que la responsabilidad en la seguridad de los trabajadores/as frente a un siniestro por robo es de la ONCE, y otra vez, han vuelto a ganar.
Estar en la calle para el colectivo de vendedoras y vendedoras, además de los riesgos a los que están expuestos cada día, se suma otro de vital importancia que para CSIF ONCE es inasumible que tengan que recaer sobre los trabajadores y trabajadoras que padecen ese riesgo, solo porque lo diga la dirección o el sindicato “amigo”.
«Por desgracia es más habitual de lo que imaginamos que los amigos de lo ajeno pongan su mirada en nosotros. Cuando esto ocurre la persona afectada debe comunicarlo a sus superiores e interponer la pertinente denuncia ante la autoridad, Policía Nacional o Guardia Civil, y con esa denuncia tramitar en la ONCE, el reintegro de lo robado a la compañía de seguros. También es muy habitual que cuando esto ocurre la respuesta de la compañía sea que no se hace cargo del siniestro por considerarlo “HURTO”, que es la forma de librarse de retribuir la cantidad siniestrada y que la ONCE comunique por escrito que la compañía se niega a pagar argumentando que lo considera “HURTO” y que debes asumir tú la responsabilidad pagándolo, y que el dinero que ganas trabajando, y que es de tu familia, de tus hijos, para tu hipoteca si la tienes, o simplemente para que lo disfrutes porque es tuyo, lo dediques a pagar una deuda que generan ellos, la ONCE, y que es defendida por el sindicato UTO-UGT, por no querer asumir un riesgo que los tribunales por medio de las demandas presentadas por CSIF ONCE, ya ha quedado meridianamente claro que, si no se demuestra mala FE, es responsabilidad de la empleadora y no del empleado/a por cuenta ajena, que es lo que somos los trabajadores/as de la ONCE», destacan desde CSIF.
El 15 de enero de 2024, a las 10:30 de la mañana en la sala de lo social de la ciudad de la justicia de Valencia, el sindicato CSIF tenía señalamiento de juicio para defender a una afiliada a su sindicato de un robo que padeció el pasado 8 de marzo de 2022 y que obviamente ni la compañía, ni la ONCE quisieron asumir, juicio que no se va a celebrar puesto que la ONCE, a través de su asesoría jurídica, comunicó la semana pasada que asumirá el siniestro y pagara a la trabajadora en la nómina de enero, el dinero detraído en su momento.
«Con esto demostramos, que estar bien representado es garantía de que tus derechos no sean pisoteados. Lo que para la dirección de la ONCE y que asume el sindicato UTO-UGT como normal, no es normal, y los riesgos del trabajo los tienen que pagar la empresa, por más que le pese a ellos y a su sindicato».